De estreno: Los Caballeros del Amor Hermoso

Autor:

DE ESTRENO

«El libre albedrío, la espontaneidad y la frescura impuesta caracterizan nuestro sonido»

 

De las cenizas de Caballero Reynaldo, compañeros en Los Visionarios y procedentes de otras formaciones paralelas, Luis González, Manoel Macía y Román García se han unido ahora para dar vida a Los Caballeros del Amor Hermoso. Un proyecto enraizado en el pop clásico con destellos de new wave, una personal sofisticación y un disco ya en su haber.

 

Texto: CÉSAR CAMPOY.
Foto:
LCDAH.

 

Que Luis González no puede parar quieto es evidente. Menos de un año después de dar por finiquitada la dilatada e incontinente trayectoria de Caballero Reynaldo, el creador se saca de la manga, «por puro azar», Los Caballeros del Amor Hermoso, una aventura en la que se rodea de los viejos conocidos Manoel Macía y Román García, para facturar un pop tremendamente pegadizo y resultón del que emanan efluvios ochenteros, y un buen gusto y sofisticación evidentes. En poco más de media hora, el trío articula un disco, Sagrado corazón de Jesús, que penetra por la puerta grande en el olimpo de esa peculiar e imprevisible factoría llamada Hall of Fame Records.

 

¿De dónde venís? Geográficamente y de proyectos anteriores. 
Luis González: De Cuenca. Y en cuanto a proyecto anteriores: Los Visionarios, Caballero Reynaldo, Amor Sucio, Malcolm Scarpa, Mar Otra Vez.
Manoel Macía: De Villalba (Lugo). He estado en bandas como Galadriel, Berlin Zoo, Muzik, Los Visionarios.
Román García: De Murcia. Vengo de Los Marañones, Joaquín Talismán y los Chamanes, Caballero Reynaldo & The Grand Kazoo, Los Astrónomos, Fernando Rubio & The Inner Demons, Los Visionarios.

 

¿Cómo nace el proyecto?
LG: Por puro azar. Manoel nos había dado las bases para el nuevo álbum de Los Visionarios y, al verlo desocupado, le dije que cuando le apeteciera guitarrear me lo dijera. Lo hizo de inmediato, así que le envié todas las demos que hicimos con Caballero Reynaldo para un monográfico en La Vitti de Valencia, en 2018, con el combo The Grand Kazoo. Empezó a hacerlas tan suyas, con arreglos tan novedosos, que decidí regrabar las baterías y cantarlas desde otro punto de vista más acorde a lo que él estaba haciendo. El resultado iba siendo tan satisfactorio que decidimos inventarnos este trío para presentarlas. Román, en realidad, no ha hecho nada desde que grabó los bajos para las demos hace cuatro años, pero como siempre son tan consistentes no hemos tenido que retocar ni una coma.
MM: Me lo dieron todo hecho. Solo tuve que añadir unos arreglos libres y contingentes.
RG: Pensé en grabar de nuevo los bajos, pero como Luis y Manoel se adaptaron tan bien a lo que ya había, no pareció necesario. Está bien eso de grabar una cosa un día para una maqueta y que, al cabo de cuatro años, te digan que acabas de sacar un disco nuevo.

 

Describid vuestro sonido.
LG: Yo diría que nos ha salido un disco de pop urgente, tipo Talking Heads o XTC y cosas similares, con la impronta de Manoel y sus guitarras cardinales.
MM: Puro azar, configuraciones espontáneas de sonido influidas por lo que estaba pasando.
RG: El resultado final es un disco de instrumentación muy sencilla y muy directa, donde parece que no falta ni sobra ni una nota. Suena muy muy fresco.

 

 

Principales influencias.
LG: A mí me suena a new wave de los ochenta.
MM: Todo lo que me gusta influye consciente o inconscientemente, supongo; aunque no pienso en ello. Siempre busco algo nuevo, lo cual es muy complicado.
RG: Luis mencionaba antes a Talking Heads, y a mí me viene a la cabeza el sonido de gente como Television, a la hora de diseñar muy bien lo que hacen las guitarras y lo poco que hace el bajo para que todo encaje a la perfección.

 

¿Cómo definiríais vuestro nuevo trabajo?
LG: Una nueva vuelta de tuerca a nuestro desarrollo musical, más orientada al pop que nunca.
MM: Lo que lo caracteriza, para mí, es el libre albedrío, una espontaneidad y frescura impuesta.
RG: Una revisión luminosa de algunas de las mejores canciones del cancionero pop de este país, en mi humilde opinión.

 

Vuestro disco suena, u os gustaría que sonara, como…
LG: A mí, que sonara a XTC, a Manoel que sonara a él mismo, y a Román creo que le da igual mientras le guste.
MM: Una buena producción, que lo es, y que el que lo escuche, inevitablemente, decida.
RG: Efectivamente, lo importante es estar satisfecho con el resultado final. Lo que más me gusta de esta aventura es que nunca estás seguro de cómo va a acabar sonando la cosa hasta que no están encajadas todas las piezas.

 

Cinco discos de cabecera.
LG: Skylarking, de XTC.
MM: Voyage of the acolyte, de Steve Hackett, y Sinfonía celta, de Alan Stivel.
RG: Apostrophe (‘), de Frank Zappa, y New morning, de Bob Dylan.

 

Cinco canciones perfectas.
LG:“My funny Valentine”.
MM: “Close to the edge”, “Selling England by the pound”.
RG: “Round about midnight”, “Good vibrations”.

 

¿Preferís estudio o directo?
LG: No tocamos en directo, somos un trío exclusivamente de estudio tanto con Los Visionarios como ahora con Los Caballeros del Amor Hermoso.
MM: Circunstancialmente, estudio.
RG: Pero los tres hemos compartido escenario en más de una ocasión y ha sido siempre una experiencia fantástica. No se descarta que volvamos a hacerlo en el futuro.

 

 

¿A quién os gustaría telonear?
LG:A King Crimson.
MM: Rick Wakeman.
RG: Me apunto a lo de King Crimson pero, por favor, que esté Rick Wakeman en los camerinos comentando el concierto.

 

¿En qué disco de homenaje os gustaría participar?
LG: En uno a Stravinsky.
MM: En uno a Luis G y Román G.
RG: Lo que diga Luis. Yo me apunto. Aunque en el fondo, ya he participado en un par de homenajes a Caballero Reynaldo.

 

¿Qué canción de vuestro nuevo trabajo es la que mejor os representa y por qué?
LG: “Desconectando variaciones”.
MM: Yo diría que todas, en plan ecléctico. Hay cosas en algunas letras que identifican, estructuras musicales innegociables… etc.
RG: El disco lo veo como un todo, todas las canciones lo representan. Si tuviera que destacar una sería “La herencia genética”, porque ya la había grabado con Los Marañones, así que le tengo un aprecio especial.

 

¿Cómo sois encima de un escenario?
LG: Invisibles.
MM: Está por ver.
RG: Sí, ya veremos.

 

¿Qué planes tenéis para este año?
LG: Promocionar este disco, pensar qué hacemos para el segundo, terminar el nuevo álbum de Los Visionarios y otro con Manu Vicente.
MM: Estamos en pleno proceso con Los Visionarios, dedicándole mucho tiempo y cariño, y yo, particularmente trabajando con bases acústicas en un nuevo proyecto personal.
RG: Además de lo de Los Visionarios, por lo que a mí respecta también está a punto de publicarse un disco nuevo de Los Astrónomos (el trío de folk surrealista que tengo con Joaquín Talismán y José Filemón). Y luego están los conciertos que vayan saliendo con Los Marañones y los grupos de Joaquín Talismán y Fernando Rubio.

 

Tenéis cincuenta palabras para vender vuestro disco. Adelante!
LG: Es un disco de pop clásico, onda new wave pelín excéntrica y saltimbanqui, con arreglos sofisticados que fluyen de modo directo y fácil de escuchar.
MM: Comprad, que necesito cuerdas.
RG: Yo no sé vender nada pero, como todavía nos quedan palabras por usar, aprovecho para decir que ya se nos acabaron.

Anterior De estreno: Ananga Ranga.

Artículos relacionados