Dani Flaco: Versos, madera y escenarios

Autor:

dani-flaco-06-03-14

«Cuando acabas un disco te vacías tanto que crees que piensas que jamás escribirás una canción otra vez»

 

César Pop, Fernando Polaino y Pepo López arropan a Dani Flaco en su nuevo disco, «Salida de emergencia», que el barcelonés presenta esta semana en directo en Madrid. Antes llenó tres noches el Auditori de Barcelona, que no es poca cosa.

 

 

Texto: ARANCHA MORENO.

 

 

Tiene la voz algo tocada porque anoche fue a ver actuar a Krahe, porque es “a quien más admiro”. Lo dice Dani Flaco, que lleva más de una década haciendo canciones, desde su estreno discográfico con «Salida de emergencia» (2006). Ahora publica su sexto álbum, «Versos y madera», un trabajo en el que ha contado con las guitarras de Pepo López, el acompañamiento de César Pop y la producción de Fernando Polaino, entre otros compañeros de grabación. Y un trabajo que ha financiado gracias al público, que ha respondido al crowdfunding y ha llenado tres noches consecutivas el Auditori de Barcelona, su tierra natal. Ahora se aproxima a Madrid, al escenario de la sala Galileo Galilei, donde desembarca este viernes 7 de marzo para presentar sus nuevas canciones en directo.

¿Al titularlo «Versos y madera» ya has hecho la mejor radiografía del disco?
Sí, curiosamente el título es previo a la canción, la escribí la noche antes de empezar a grabar el disco, con el repertorio cerrado. Estaba en casa, haciendo una canción, y al llegar al estribillo me salió de forma natural Me acostumbré a las noches en vela llorando lágrimas de acuarela, y puse a arder versos y madera. Es el resumen del disco: canciones hechas con una guitarra, versos alumbrados por una guitarra acústica, escritos en caliente.

El disco tiene su espacio para el rock, pero respira bastante folk, ¿por qué?
Viene por dos motivos, por la música que escucho ya hace años, y la guitarra que tengo de ese estilo. En las canciones influye bastante el estado emocional en el que estás. Yo estaba bastante bajo de moral, solo en casa, a altas horas de la madrugada, y eso hace que tenga un aire intimista el disco.

En este disco se mezclan las canciones vestidas con algunas acústicas a guitarra y voz. ¿Cuáles te costó más redondear?
Una canción regular con un buen vestido puede parecer una buena canción, pero a guitarra y voz es mucho más difícil.

Compusiste bastante material para este disco, pero luego hiciste una buena criba: te has quedado con doce temas. ¿Qué ha quedado fuera?
No tengo pena por ninguna, si te digo la verdad. Los últimos dos meses antes de hacer el disco la cabeza funciona a tope, hice cuatro y las cuatro entraron en el disco. He terminado el disco hace poco y estoy en un momento en el que no quiero saber mucho de hacer canciones, dejo el repertorio ahí. Me apetece mucho cantarlo en directo, pero no me apetece pensar en qué he hecho o no, y estoy en plena crisis, no se me va a ocurrir nada más. Cuando acabas un disco te vacías tanto que crees que piensas que jamás escribirás una canción otra vez.

Así que sabes desvincularte emocionalmente de tus canciones.
No sé hacerlo, pero sí del trabajo de hacer canciones. Me apetece cantar, ahora no soy capaz de escribir. He acabado muy vacío tras el proceso de escribirlas, grabarlas y escucharlas muchas veces en el estudio.

En estos días tan recientes, y con un disco en el que se respira tanto la guitarra, no puedo dejar de preguntarte qué significa para ti Paco de Lucía.
Paco de Lucía era un genio, ha sido tan grande que lo conoce cualquier persona de todo el mundo, como los Cristianos o Messis, que los conoce todo el mundo. Vas por la calle en Hong Kong y a cualquiera que pares le hablas de Paco de Lucía y sabe quién es. Eso dice todo de su arte, de lo que innovó, de lo que fue capaz de dejar.

¿Sabemos apreciar a los héroes vivos o solo a las leyendas?
Nos cuesta mucho apreciar a los héroes vivos, es verdad. Pero Paco tenía un prestigio enorme. A lo mejor en España nos cuesta más, nadie es profeta en su tierra. Seguramente pasa con todo el que va cayendo, va creciendo la leyenda, pero Paco ya era una leyenda en vida.

En este disco, ni estás solo, ni mal acompañado: Pepo López, César Pop, Fernando Polaino… ¿Qué os une?
Pepo lleva tocando conmigo casi doce años, la relación va mucho más allá de la profesional. No va a hacer esta gira conmigo porque está más centrado en Chivo Chivato y en la gira con Quique González, pero Pepo es mi hermano: cada vez que me pasa algo, sea bueno o malo, le llamo. Va a estar en mi vida siempre y va a tocar conmigo siempre que quiera y pueda. César es uno de mis grandes vínculos en Madrid. César en el disco es como si juega Messi en tu equipo, toca todos los instrumentos y los toca bien, para mí es uno de los mejores músicos de España. Y a Polaino le conozco desde hace muchos años, pero nunca habíamos trabajado juntos, la simbiosis y el entendimiento entre los dos ha sido increíble. Musicalmente ha sido maravilloso, personalmente también.

Eso por no hablar del crowdfunding con el que se ha financiado este trabajo; el público probablemente ha superado tus expectativas.
Sí, lo superamos, les estoy muy agradecido. En estos tiempos que corren, poner dinero para comprar un disco que no sabes cómo va a ser es para estar muy contento y muy agradecido.

Supongo que lo estarás también tras llenar tres veces el Auditori en Barcelona. ¿Cómo se traduce eso en emoción?
Me ha costado aceptarlo, la verdad, estoy tan acostumbrado a tocar en sitios más pequeños que lo disfruté mucho, pero no entiendo por qué ha pasado. Me alegro mucho también por los músicos que tocan conmigo, les ofreces tocar en un sitio chulo, compartes más horas con ellos, y encima del escenario sientes muchas más cosas.

El viernes 7 de marzo te subes al escenario de Galileo Galilei, en Madrid. ¿Cómo imaginas la noche?
Espero que sea una noche bonita, espero saber desconectar de la promoción y centrarme en lo que realmente sé hacer, que es cantar y tocar la guitarra. Bueno, sé hacer [risas]… es lo que menos mal se me da, lo que más me gusta. Recuerdo los Auditori, y el primer día tuve que parar de hacer entrevistas, porque no podía concentrarme hablando del disco todo el rato. Espero ser capaz de esa desconexión, pasárnoslo bien nosotros y hacer pasar un buen rato a la gente.

Para este disco has tomado prestada ‘Nos ocupamos del mar’, de Javier Krahe. Es la primera versión que se cuela en uno de tus trabajos. ¿Por qué precisamente esa canción, y por qué Krahe?
Porque le admiro muchísimo, creo que Krahe es a quien más admiro. Va a cumplir setenta años este mes y sigue haciendo unas canciones extraordinarias. Sigue teniendo un nivel espectacular, es maravilloso. Y ‘Nos ocupamos del mar’ es la canción de amor en castellano más bonita que he escuchado jamás. La escribió con veintiséis años y la tiene un poco abandonada, me apetecía volver a darle vida a la canción y homenajearles, tanto a la canción como a Krahe.

Artículos relacionados