Paul McCartney: Entrevista

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La reciente edición del DVD The McCartney years pone al alcance del aficionado una ingente cantidad de vídeos realizados por Paul McCartney, desde el final de los Beatles hasta la actualidad, junto a varios directos esenciales, solo o en compañía de Wings. Además de materiales nunca vistos hasta ahora. Una colección que sirve para repasar la trayectoria de uno de los grandes creadores de la música popular de todos los tiempos.
Para hablar de este monumental DVD, Paul McCartney –que se prodiga poco en entrevistas– visita de nuevo EFE EME. Todo un lujo.

Texto: PAUL DU NOYER.

¿Nos puedes decir cómo empezó el proyecto de este triple DVD, The McCartney years?
Alguien se dio cuenta de que teníamos todos estos vídeos que no se habían publicado nunca y los fans escribían preguntando cuándo podrían ver ese material. Así que decidimos juntarlos todos en una caja y ponerla a disposición de todo el mundo.

¿Cuál fue la flosofía para preparar el DVD y hacerlo tan interactivo?
Una vez que empezó el proyecto nos dimos cuenta de que podíamos ir mas allá del típico DVD y que podríamos añadir mas material interactivo. El director Dick Carruthers y yo llegamos con muchas ideas y pensamos “OK, en el menú pongamos algunas cosillas ocultas para los fans”. Es mucho más que una colección de DVDs, más que una simple colección de vídeos. Es como el mundo de McCartney.

La aparición del vídeo fue una gran cambio durante tu carrera, a finales de los 70 y los 80. Eso transformó el negocio de la música. ¿Lo ves como una necesidad promocional?
La aparición del vídeo musical fue realmente como un arma de doble filo, porque de alguna manera era excitante, como hacer una pequeña película. Pero en cierto sentido, no fue lo que nosotros quisimos. La única razón para hacer una peli era el directo, grabando un concierto o un programa de TV. Realmente no hicimos estas pequeñas películas, habíamos estado en A hard day’s night y cosas similares. Así que fue bueno y malo. A veces piensas “Oh, dios mío, tengo que hacer un vídeo para esto”. Pero a veces si la idea es buena, te metes en ello; por ejemplo, en algo como “Pipes of peace” nos preguntábamos qué estábamos haciendo, sentado con el director Keith McMillan. Y de repente, no estoy seguro quién, alguien llega con una idea sobre una película antigua que ponían en la BBC el día de Navidad con soldados ingleses y alemanes juntándose en la línea del frente y jugando al fútbol. Y dijimos OK, ¡ahí esta la idea! Una vez que tuvimos la idea, simplemente nos pusimos a hacer el vídeo y eso fue fascinante, buscar los regimientos que estuvieron allí. Pensé que habría algunos tipos que estuvieron allí, que sobrevivieron y que a lo mejor veían esto y no quería que escribieran diciendo que eran los Fusileros de Lancanshire y que él no estuvo allí porque estaba en otro regimiento, o cualquier cosa. Intentamos hacerlo bien y eso fue un proceso divertido, pero la clave fue pillar esa idea. Una vez que tuvimos la idea, dijimos OK, es fascinante intentar desarrollar la idea así que creo que esa es realmente la respuesta. Si los vídeos musicales tienen una buena idea que te llena, entonces disfrutas haciéndolos. Si no, es un poco aburrido.

Hay algunos vídeos en los que no apareces.
Ésos son los que me gustan.

¿Es más relajante cuando llega una buena idea que no te involucra?
Sí, me gusta eso. Recuerdo el vídeo de “Put it there”, que va de un padre y su hijo, porque la canción vino de una antigua expresión de mi padre. Solía decir que pongas algo ahí si pesa y te daba la mano. Son cosas que recuerdas cuando creces. Ni siquiera pensaba en ello cuando era un niño pero ya ves, oh, es bonito lo que decía, ponlo allí si pesa una tonelada, y eso tiene un significado, y cuando él ya no estaba todo esto tuvo un significado emocional, así que escribí la canción basándome en esto. El director que hizo el vídeo me dijo que no lo veía, que tan sólo veía dos actores haciendo de padre e hijo.

Otro aspecto bonito de esta colección son los menús, que parecen prácticamente otra colección en sí mismos. Hay algunos que son realmente extraños, ¿de dónde salieron?
Sí, cuando se mencionó hacer todo este proyecto, creo que todo el mundo al principio pensó en recopilar los vídeos y limpiarlos. Hay montones de ellos y los juntamos todos. Peo a medida que nos metíamos en ello, Dick Carruthers y Ray en particular, empezaron a decir “bueno, si yo fuera un fan viendo esto, cuando salieran los menús estaría bien tener un poco de esa filmación que nadie había visto antes”. No la podíamos usar como un vídeo entero, pero sí colocarla ahí. Así que cualquier cosa que estuviera disponible, por pequeña que fuera, la juntábamos con material para el fan o para el espectador y creo que han hecho un gran trabajo, hay material que ni siquiera sabía que existía. Debería saberlo, pero es como “Oh, no sabía que filmaron eso. Sí, lo encontramos en una lata perdida en algún lado”. Lo más excitante de todo esto era que ellos me llamaban de vez en cuando diciendo que habían encontrado cosas que ni me imaginaba, les decía que las guardaran para echarles un ojo y ver dónde lo podíamos meter. Y sí, hay cosas muy bonitas. Me gustó encontrar una pequeña filmación llamada “Backyard” que hicimos muy al principio, teníamos una cámara de vídeo y estaba sentado en la parte de atrás de Abbey Road. Hay una pequeña zona allí, el Estudio 2 donde solíamos trabajar, en la parte de atrás del edificio. Me sentaba allí y me ponía a tocar la guitarra y a cantar canciones de Eddie Cochran, Buddy Holly, Chuck Berry, simplemente las cantaba… y lo llamamos Back Yard. Nunca hicimos nada con eso, ¿qué íbamos a hacer con algo como esto? No podíamos llamar a las teles para ofrecérselo. Este DVD era el momento oportuno para usar todo ese material y ellos hicieron un gran trabajo recopilándolo todo.

PROTAGONISTAS

Vamos con algunos de los personajes que aparecen en los vídeos. Julien Temple aparece en “Beautiful night”, junto con Linda y Ringo.
Sí, para la canción “Beautiful night” no tenía una idea particular, así que lo dejé a la elección del director. Quería trabajar con Julien Temple, porque había hecho The great rock & roll swindle con los Sex Pistols y pensé que era muy buena. Le llamé y le dije que tenía esta canción, y si quería hablar sobre el vídeo. El estaba interesado y me dio una idea, pero lo mejor era que Ringo estaba en esta idea, y me pareció bonito tenerlo de nuevo en el equipo, junto con Linda. Para mí este vídeo es muy emocional. Creo que Julien hizo un gran trabajo, es auténtico, es una pequeña película de verdad, con esa señora extraña que se mete en el agua al final. Es un poco raro, pero tienes la oportunidad de ser un poco surrealista en un vídeo musical. Realmente no lo tienes que explicar, no es cómo una película de verdad; bueno, también puedes ser surrealista ahí, pero en la mayoría de ellas tienes que dar explicaciones. Y eso no pasa en un vídeo de música.

Acabas de mencionar a Ringo, él está en alguno de los vídeos. Es muy natural delante de la cámara.
Sí lo es, Ringo es una estrella del cine. Siempre lo ha sido. Es el tipo de persona que tiene ese don en su personalidad. Es muy contenido consigo mismo y se dieron cuenta de eso cuando hicimos A hard day’s night. El director Dick Lester quería una escena con Ringo y al parecer Ringo había estado de marcha toda la noche y apareció en el rodaje sin haber dormido nada y Dick dijo, “Bueno, ¿sabes lo que te digo? Ponte ese sombrero y ese abrigo y, ¿eres capaz de andar por los bancos de ese canal, por favor?”. Ringo dijo que sí, y empezó a hacer cosas, patear latas y entonces vino un chico y, es simplemente la personalidad de Ringo, ve lo que le estén pidiendo y lo hace. Es muy natural y siempre es bueno tenerlo en un vídeo. Sabe lo que está haciendo, es bueno en eso.

Una tercera parte importante del DVD es el material en directo.

Sí, gran parte del material en directo no ha estado disponible para la gente y es también una parte importante de lo que hago. Pensamos que había cosas que no se habían visto nunca o no se habían publicado y deberían estar en la colección y una vez que decidimos que se iba a llamar The McCartney years, tomamos una perspectiva mas amplia. Me gusta mucho la parte en directo. Te da otra visión de lo que hago, escribo música y me ves en los vídeos, pero el directo es lo mas auténtico. Creo que es un elemento muy fuerte de lo que hacemos y por eso hemos incluido mucho material en vivo.

Y te permite añadir material de los Beatles.
Es verdad que ampliamos la selección musical, porque trae canciones de las que no teníamos vídeos y me permite incluir canciones de los Beatles sobre las que tenía ciertos reparos a tocar en directo, especialmente en la época de The Wings. Pero a medida que pasaba el tiempo, empecé a pensar, “Bueno, a mí me gustan estas canciones de los Beatles, a la gente también y ahora ya hemos establecido a los Wings y tenemos nuestros propios éxitos. Me puedo relajar e incluir este material”, y ahora hago más canciones de los Beatles que nunca.
No puedes negar que a la gente le gusta. La gran mayoría es material muy bueno, porque lo hicieron los Beatles y también es muy conocido, y la gente tiene nostalgia… e incluso a los que no estuvieron allí, les gusta. Fue bonito incluirlo en esta colección.

El show del festival de Glastonbury, ¿fue un reto?
Desde los años 60, siempre había querido tocar en Glastonbury, porque estaba allí cuando empezaron. Antes no había festivales. Ahora forman parte de nuestra vida, así que siempre quise formar parte de ellos, estar involucrado. Pensaba que quizás era todo un reto, o quizás no… Michael Eavis me llamaba y me decía “Eh, el año que viene Glastonbury, ¡vamos!”, le respondía que sí y luego nunca le llamaba. Un amigo mío que había estado el año anterior me hablaba del gran ambiente que había por la noche y me decía “Recuerdo volver por la noche y todo el mundo cantando canciones de los Beatles”. Y yo decía “Bueno, eso está muy bien, ¡lo podría hacer yo!”. Ahí es cuando pensé que debería tocar y llamé a Michael y me dijo que sería genial. No estábamos de gira, así que lo primero fue ensayar canciones, no quieres ir a Glastonbury en mala forma porque todo el mundo va a tocar en mitad de su gira. Hicimos una minigira antes para prepararnos, que fue muy bien. Glastonbury era nuestro último concierto en esa gira y nos sentíamos muy bien, estaba lloviendo y había barro por todas partes, ¡Era el perfecto festival de Glastonbury y nos sentíamos genial! Fue muy excitante estar allí y, para mí, otra cosa del festival que me ha fascinado siempre es su situación geográfica en el mapa, que es muy cósmica, muy de los 60. Aparecimos, tocamos muy bien, hicimos un montón de canciones de los Beatles, estábamos sobre esas líneas cósmicas del mapa y teníamos un público fantástico, enorme, con todas esas banderas, algo muy medieval. Y por supuesto su entusiasmo, incluso bajo la lluvia… tuvimos una noche perfecta. Había un ambiente fenomenal y me alegro de haber incluido este concierto en The McCartney years.

¿Qué nos cuentas de Live Aid?  Por supuesto has arreglado tu actuación, ¿verdad?
Bob Geldof me pidió tocar en el Live Aid, pero le dije que no tenía una banda preparada. Insistió, dijo que no importaba, y realmente él te puede convencer. Pensé que podía hacer simplemente “Let it be” al piano. Llegué allí ese día y no sabía nada de nada, no tuve ensayos, ni prueba de sonido… Nada. Estaba en un lado del escenario y me dijeron “Vas ahora”. Había una cortina y un piano. No me podía escuchar por los monitores y pensé que los estarían ajustando. Lo que pasó es que estaban por ahí los “roadies” de Queen y los habían desenchufado, así que estaba sin monitores y no tenía ni idea de si mi voz sonaba o no. No podía escuchar nada. No podía escuchar el piano, no me escuchaba, pero confié en que todo fuera bien. De repente, a mitad de canción, escucho un gran “feedback” de sonido y pienso “Oh, no, esto está mal”, pensé en parar. En esos momentos se te pasan por la cabeza un montón de cosas, pero me di cuenta de que si paraba iba a parecer estúpido, así que seguí. ¡Mal hecho! Debería haber parado y pedir excusas, teníamos que arreglar eso… En un momento, durante la letra, digo “There will be an answer, let it be” y de repente escucho otro “feedback” y me digo “Canta Paul, canta”. Fue una pesadilla, era mi única canción en un evento enorme… Pero entonces el querido público me ayudó y empezaron a cantar. Al terminar les pregunté si había alguna manera de arreglar esto, porque obviamente iban a emitirlo más veces, así que les pregunté si podía regrabar mi voz para la posteridad. Lo hice. La canté de nuevo y es como tenía que haber salido. La versión real en directo no esta en el DVD y fue una pesadilla que estoy intentando olvidar. Es terapéutico, ¿verdad?