No es de extrañar que la semana pasada un periódico sensacionalista inglés volviera a hablar del posible fin de los Rollling Stones, justificando éste en las últimas declaraciones de Keit Richards sobre su socio Mick Jagger. Y es que, desde hacía décadas, Richards no ofrecía tantas muestras de su dominio del lenguaje oral. Y jamás se había mostrado tan abiertamente dispuesto a revelar datos sobre la que durante años se ha supuesto tormentosa, o cuando menos peculiar, relación con Jagger.
Sus últimas declaraciones son de este fin de semana, aunque algo más moderadas que las que venía ofreciendo: «Si no trabajamos, entonces probablemente sólo hablamos como una vez al año. Unos faxes, dibujos y apuntes aquí y allí. Si nos pasamos dos años y medio juntos, ya nos hemos dicho el uno al otro, más o menos, todo lo que nos tenemos que decir.»
También aseguró que espera volver a rodar pronto con los Stones.
