José Antonio García y El Hombre Garabato: Disparos certeros

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«Hay gente que me está diciendo que es el mejor disco que he hecho desde que dejé 091, en cuanto a las canciones y a la producción»

 

José Antonio García, leyenda viva del rock español desde los días de 091, se ha junto con los jóvenes de El Hombre Garabato para dar forma a un disco conjunto con canciones de Lapido y Antonio Arias. La conexión granadina sigue en marcha.

 

 

Texto: ARANCHA MORENO.

 

 

La unión musical funciona, y la intergeneracional también. Si no, prueben a escuchar «Cuatro tiros por cabeza», el disco conjunto que han grabado el veterano rockero José Antonio García y la joven banda El Hombre Garabato. Alguno de ellos todavía iba al colegio cuando se disolvió 091, la mítica formación en la que militaba José Antonio, y ahora le acompañan en este disco, un vinilo en el que ellos ejercen de banda base y el rockero pone voz a la mitad de los temas, firmados por ilustres como José Ignacio Lapido o Antonio Arias. Un jugoso experimento que fructifica en una gira con varias fechas cerradas los primeros meses de 2015. De momento, los granadinos pasan por Madrid y nos juntamos con ellos al término de un largo día de promoción, aunque para hablar de canciones, siempre hay ganas.

Empezad por el principio. ¿De dónde nace esta amistad que ha acabado en un disco?
J.A.: Ellos me invitaron a cantar y grabar un videoclip de una canción suya. Yo ya había estado viéndoles en directo, su segundo disco me gustó mucho, tenían buenas canciones, buenas melodías y buenas letras. El punto de partida fue aquel videoclip. Y empezamos a vernos, a hablar de hacer algo juntos.
H.G.: Nosotros le perseguimos antes, pero nos dio calabazas. Tienes que admitirlo [ríen].
J.A.: Sí, en el primer disco, pero yo no los conocía de nada…
H.G.: Le llevé mi disco, y ni caso.
J.A.: No, sí… [ríen]. Sobre todo fue el segundo disco el que me gustó, es más redondo. Así nació el proyecto. Yo quería hacer un disco en solitario, cantar canciones de compositores granadinos. Estaba pidiendo canciones a gente, y empecé a hablar con ellos. Me gustó la banda, y había feeling. Empezamos a trabajar juntos, ver canciones… De primeras iba a hacer un epé, después surgió la idea de hacer un disco como se hacían en los años ochenta, un grupo por cada cara, como hacían Gabinete Caligari, Parálisis Permanente… Les gustó la idea, hablamos de sacarlo en formato vinilo, porque el cedé estaba muy devaluado. Y empezamos a trabajar en el disco.
H.G.: Hay dos claves, la personal y la profesional. En lo personal encajamos muy bien, admiramos mucho a 091, TNT y cosas que ha hecho después. En lo profesional vimos que artísticamente funcionábamos. No somos una gran banda de guitarristas, pero en conjunto funciona. Es como el Atleti: no tiene grandes jugadores, pero funciona.

¿Cómo repartisteis los roles?
J.A.: Queríamos separarlos, porque cada uno tiene su personalidad. Había que buscar una vía de sonido, y buscamos un punto de unión, una canción con la que yo hice el vídeo. Fue la canción que compartimos en el disco, una canción de su disco anterior, ‘Otra vez’.
H.G.: Nosotros tocamos casi todos los temas como banda, la banda base somos nosotros. Él andaba buscando una banda base, no quería mercenarios que tocaran, sino una banda hecha, que funcionara.
J.A.: Quería una banda establecida que me gustara. Ellos tienen una línea diferente a lo que yo he hecho siempre, son más indies, aunque también les gusta el rock, son más jóvenes que yo… Para mí era una forma de renovarme.

¿Recurriste entonces a compositores granadinos para los temas de ‘tu cara’ de este disco?
J.A.: Hay un tema de José Ignacio Lapido, ‘No puedo prometerte nada más’, y de Antonio Arias es ‘Mírame’. Luego hay uno que hice con el antiguo guitarrista de Guerrero García, Toni Guerrero, ‘Julio del 36’. También había un tema que El Hombre Garabato habían desechado del disco anterior, ‘A punto de estallar’. Al escucharlo me gustó muchísimo, es el que hemos sacado como single.

José Antonio, en estos temas de «Cuatro tiros por cabeza» vuelves a sonar tan rock como de costumbre.
J.A.: Sí, hay canciones también de medios tiempos, pero es rock. Hay gente que me está diciendo que es el mejor disco que he hecho desde que dejé 091, en cuanto a las canciones y a la producción. Yo no lo sé, no quiero decirte que es el mejor disco que he hecho en mi vida, pero creo que ha quedado muy bien.
H.G.: José Antonio tiene una voz muy personal, es historia del rock en España. Toque lo que toque se lo lleva a su sitio. Es una de las voces con más carisma del rock español. Haga lo que haga suena rock.

El rock de José Antonio contrasta con el deje más pop de El Hombre Garabato.
H.G.: Nosotros somos mucho más pop. Yo siempre digo que nosotros somos demasiado indies para los rockeros, y demasiado rockeros para los indies. Pero bueno, nos sentimos cómodos ahí. Está la influencia de Granada en los coros, desde Los Ángeles a Lori Meyers, sin ser premeditado se nos ha colado y la armonías corales le han dado un carácter muy pop al disco.

Vuestra música suena algo más alegre que las letras, que son algo más sombrías en este trabajo. Me refiero a eso de no ver la luz al final del túnel y rozar el desastre. Incrementa el contraste entre música y letra.
H.G.: Sí, contrasta. Me parece que es constructivo, no son letras derrotistas. Intentan ser una fotografía de lo que ocurre, de una manera un poco velada. Pero el colapso que estamos sufriendo, no sólo artístico sino económico, político y social, es una gran explosión. El símbolo del tiro, el disparo, la explosión retrata el final de una época. Estamos retratando el fin de una época. Estamos en un cambio serio, y con los años nos vamos a dar cuenta. Queríamos demostrar esa crisis, esa ruptura con lo anterior. En este disco, casi todas van en esa línea.
J.A.: Yo me siento muy cómodo cantándolo, y a mí ese tipo de letras siempre me han venido muy bien. Al fin y al cabo, yo vengo de una banda de rock.
H.G.: Además, Granada es la única ciudad que tiene nombre de bomba, como dice Eric, de Los Planetas.
J.A.: Eso no lo dice Eric, se lo atribuyen a él, pero lo dijo Jesús Arias.

Ahora que mencionáis a Eric, ha colaborado en este trabajo.
J.A.: Sí, Eric hace la batería en ‘A punto de estallar’, Víctor García Lapido hace el punteo de ‘Nubes de colores’, y José Ignacio Lapido grabó varias guitarras. Antonio Guerrero grabó en ‘Julio del 36’.
H.G.: El estudio fue una especie de camarote de los hermanos Marx ese día, entró todo el mundo.

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«Ellos en cierta forma se han aprovechado de mí y yo me he aprovechado de ellos. Ellos me dan una cosa y yo les doy otra»

 

¿Por qué es Granada un hervidero musical?
H.G.: Sí, es un hervidero a pesar de las instituciones, porque no es una ciudad que favorezca a la cultura, pero es una ciudad propicia al arte, desde Manuel de Falla, Lorca, Ganivet… Nosotros en cierta forma somos los humildes herederos de todo eso.

A veces lo de juntarse con otro artista o banda funciona. Acaba de pasarles a Quique González y José Ignacio Lapido en su gira conjunta, por ejemplo. ¿La unión hace la fuerza?
J.A.: Sí, cuando hay problemas en una banda nos apoyamos los unos a los otros, te sientes más fuerte y puedes solventarlos. En este caso ha dado resultado aunar fuerzas. Y en lo artístico y musical, compartir ideas es muy gratificante.
H.G.: Y eso que ahora las bandas se disuelven y hacen carreras por separado, pero luego vuelven a unirse, porque se ve que solos no pueden. Yo le veo solo virtudes. Me imagino que hay gente con caracteres muy fuertes, pero nosotros no hemos tenido ningún encontronazo. En cierto sentido, hemos aprovechado la fama de José Antonio.
J.A.: Sí, ellos en cierta forma se han aprovechado de mí y yo me he aprovechado de ellos. Ellos me dan una cosa y yo les doy otra.

Vais a hacer una gira conjunta y ya tenéis algunas fechas cerradas: el 3 de enero en Córdoba (Ambigú Axerquía), el 21 de febrero en Jaén (Sala Iroquai), el 7 de marzo en Madrid (Costello) y el 21 de ese mes en Motril (Teatro Calderón). ¿Será todo el concierto a medias?
J.A.: Vamos a tocar el disco en directo, y aparte harán una parte como banda, y yo otra como José Antonio García, con canciones de este disco y con otras de mi carrera musical, desde TNT hasta Guerrero García.

Hablando de Guerrero García, el proyecto no se ha disuelto, ¿no?
J.A.: No, está aparcado. Para meterme en este proyecto hacía falta.
H.G.: Somos la amante, la otra.
J.A.: Es mejor no estar en dos bandas a la vez, prefiero estar con una sola.

Para grabar el disco habéis recurrido al micromecenazgo en una plataforma de crowfunding, y os ha funcionado bien: pedíais 3.000 euros y superásteis los 6.000. ¿Una buena experiencia?
H.G.: Ha sido realmente buena, nosotros tenemos un grupito que nos sigue y José tiene una legión de fans que ha respondido. Pedimos poco para poder llegar al objetivo, pero lo duplicamos. Pero no es oro todo lo que reluce, hay mucho dinero que se queda en el camino: el IVA, la plataforma que financia el proyecto…
J.A.: El 21% nos machaca a los músicos.

El IVA oscila mucho, en la prensa se ha comentado bastante el que tienen las revistas pornográficas: un 4%.
H.G.: ¿Y qué hago yo haciendo música? [risas].

Cuando acabéis los directos, ¿acabará vuestro proyecto conjunto, o habrá algo más?
J.A.: Esto es el principio de algo, no es que tengamos nada pensado en concreto, pero ya andamos pensando en hacer nuevos temas.
H.G.: Algo haremos. Como dice mi abuelo, “la obra irá pidiendo el material”. Seguro que algo surge, pero él tiene que coger su nombre, con la carrera tan larga que tiene nunca ha hecho nada solo. Si necesita que estemos hay de palmeros, o componiendo, estaremos, pero también estamos pensando en hacer nuestro disco. Juntos, probablemente como este disco no haremos nada, no tiene sentido, pero lo que él haga solo le ayudaremos seguro, y le pediremos que cante en nuestros discos.

José Antonio, llevas más de treinta años de rock pero siempre has estado asociado a proyectos conjuntos, nunca en solitario.
J.A.: Sí, yo siempre me he encontrado bien así, con una banda. Dar este paso me ha costado trabajo, y al final me he rodeado de una banda. Es como me encuentro más cómodo. Será porque siempre me ha gustado compartir las cosas. Yo no sirvo para tener unos músicos mercenarios. Al final quería ser yo solo, José Antonio García.
H.G.: ¡Si quieres buscarte otra banda, no pasa nada! (ríen)

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