Jonston: Un mundo aparte

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«En las letras de algunas canciones las letras han sido importantes. Pero, curiosamente, en las más alucinadas no hubo drogas de por medio. No es algo que necesite, ya tengo la cabeza estropeada de por sí»

Vuelve el cantautor galáctico madrileño, que acaba de publicar «Veo visones», un exuberante tercer álbum repleto de canciones pop deliciosas y atemporales, pobladas por curiosos personajes. Eduardo Guillot lo entrevista.

 

 

Texto: EDUARDO GUILLOT.
 

 

Está pletórico. Y su tercer álbum es la prueba irrebatible. Con Paco Loco de nuevo a los controles, Jonston se ha sacado de la manga un disco repleto de magia pop.

Te confunden a menudo con Daniel Johnston y titulas el disco con una frase que mucha gente leerá como «Veo visiones». ¿Te gusta ponerte dificultades?
Constantemente, me gustan los retos. Estamos aquí para jugar. En serio, era una broma.

¿Cuánto hay en el disco «Veo visones» y en la canción ‘Veo visiones 2’ de homenaje a Los Gritos?
Me gustan Los Gritos, y particularmente la canción ‘Veo visiones’, pero no es un homenaje. Empecé a cambiar visón por visión en las frases y me hizo gracia cómo quedaba.

¿Has trabajado el disco como en otras ocasiones o llegaste a Cádiz con margen para que la entente con Paco Loco diera frutos inesperados?
Mi idea era llegar al estudio con las canciones recientes y apenas sin cerrar, para poder darles forma allí. En el disco anterior vi que Paco y yo nos entendíamos bien y quería dejarle margen para hacer lo que quisiera.

¿Es cierto que las drogas han jugado un papel importante en la confección del disco? ¿En qué sentido?
En las letras de algunas canciones, sí. Pero, curiosamente, en las más alucinadas no hubo drogas de por medio. No es algo que necesite, ya tengo la cabeza estropeada de por sí.

El disco no suena a revival ochentero ni a copia de «hype» anglosajón. ¿Te sientes al margen en la escena pop española?
Muchas gracias. Siempre me he sentido al margen de cualquier escena, es algo que me gusta. No creo en las escenas y me parece que, gracias a eso, mis discos se podrán escuchar dentro de unos años sin sonar ridículos.

Háblame de la influencia tropicalista, que está presente, pero de manera más sutil de lo que sugieren algunas reseñas.
Se nota más en la estructura de algunas canciones que en el sonido, la influencia es más ideológica que musical. Quería romper con la canción pop clásica y llevarla a otros sitios. Soy fan de Caetano Veloso, Os Mutantes y Tom Zé y los he escuchado bastante antes de grabar.

¿No se te ha pasado por la cabeza desarrollar literariamente las delirantes historias que protagonizan tus canciones?
Prefiero intentar hacer buenos discos. Igual más adelante se me queda pequeño el formato de canción y necesito escribir una novela, nunca se sabe. Pero ahora lo descarto.

Tras trabajar por tu cuenta en «Taller de memoria», has vuelto a un sello, en este caso Primeros Pasitos. ¿Por qué?
Está coeditado por Primeros Pasitos y Pez Plátano, que es mi sello. Sigo teniendo el control artístico, pero ahora Primeros Pasitos fabrica el disco y busca conciertos. Y la distribuidora ¡Pop Stock! pondrá «Veo visones» en las tiendas. Es un buen equilibrio, algo parecido a lo que hace Marxophone. Con «Taller de memoria» eché en falta una mínima infraestructura para que el disco funcionase por ahí.

¿Se puede hablar ya de tu salida de Limbo Starr? ¿Qué pasó para que te fueras y por qué no lo has comentado hasta ahora?
Tenía una cláusula en la carta de libertad que me impedía hablar de ciertas cosas, pero tampoco voy a despotricar ahora. Ellos hicieron su trabajo como pensaban y yo no compartía su punto de vista. El tiempo pone cada cosa en su lugar.

¿Qué banda llevas en directo?
He grabado con Miguel Aguas (bajo) y Alejandro Jordá (batería). Vuelvo al formato trío, como cuando empecé, y estoy muy contento, creo que le queda muy bien a las canciones. Nunca  he sonado tan bien.

¿Hay perspectivas de gira?
Vamos a hacer algunos conciertos de presentación antes de verano, y después empezaremos una gira un poco más extensa. La cosa está mal, pero hay que seguir adelante. Tampoco me puedo quejar, tengo suerte de tener tres discos y seguir tocando.



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