El disco del día: Doble Pletina

Autor:

«Las canciones de Doble Pletina son verdaderos popemas, breves, leves, con una melodía circular y un marcado aire popular»

doble-pletina-18-06-13

 

Doble Pletina
«De lo concreto a lo general»
JABALINA

 

 

Texto: CÉSAR PRIETO.

 

 

Por fin la promesa barcelonesa se afianza con un elepé. Doble Pletina, tras unas maquetas y tres singles que circularon casi en secreto y tras la producción de Cristián Pallejà, de Fred i Son, han formulado trece canciones nuevas, para partir de cero sin querer aprovecharse de ninguno de sus éxitos más reconocidos.

Sigue, eso sí, el quinteto barcelonés, en unos mismos parámetros: bases electrónicas no exentas de pequeños arreglos primorosos –inmenso el bordado de trompeta y violín–, desazón cotidiana en las letras y la misma delicadeza que Stephin Merritt o el Donosti Sound. Ejemplo evidente es ‘Error de cálculo’, en la que flota la sombra de Le Mans.

Sin embargo, estos referentes se quiebran del todo cuando pequeños detalles hacen que la canción suene personal, nueva. El intento de ajustarse a géneros existentes y alejados fructifica y consigue dar variedad a un disco que puede tender a la atonía. Ahí entra la languidez tropical de ‘Hacer algo’, el minimalismo oriental de ‘Teoría y práctica’ o el bajo de ‘Quiero ser Santa’ que colocan en ‘Te guste o no’.

En realidad, el campo de conexiones es mayor que el que proclaman los artículos aparecidos sobre ellos; cierto es; las canciones de Doble Pletina son verdaderos popemas, breves, leves, con una melodía circular y un marcado aire popular; así que los degustadores del estilo se sentirán felices con ‘Dimes y diretes’ o ‘Igual o mayor que’, que ganan en intensidad por el camino de la sencillez. Pero a su vez, por las letras que exprimen lo ácido de la banalidad cotidiana y por sus melodías atrayentes pero estáticas parecen jugar en la misma liga que Los Punsetes o los Espanto anteriores al disco; eso sí, más calmados, más señoriales, observando la realidad tras el marco de una ventana. Ya no son un grupo amateur, cierto es, pero siguen teniendo el inconfundible encanto de lo que se moldea en casa.

Anterior disco del día: Kobo Town.

Artículos relacionados