El disco del día: «Chico & Rita»

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«Un disco de alto voltaje sensitivo, de esos que, una vez más, nos lleva a preguntarnos qué fue de todo ese público que hace una docena de años se subió a la explosión musical cubana»

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«Chico & Rita»
CALLE 54/SONY MUSIC


Texto: JUAN PUCHADES.


La banda sonora de «Chico & Rita», la película de animación ideada por Fernando Trueba y Javier Mariscal, es una soberbia introducción a los sonidos cubanos fundidos con el jazz, lo que se conoce como jazz latino y que traza una línea imaginaria (pero muy real) que une a La Habana con Nueva York. Bebo Valdés ejerce el papel de maestro de ceremonias (metido en la piel de «Chico»), arreglando y tocando el piano, desplegando un sonido de big band caliente a lo largo de toda una grabación que, con sus postulados clasicistas, aferrados a la mejor tradición de la isla, son pura y gozosa maravilla para el oyente. Aunque, más allá del «gran sonido», también incluye algunos momentos espectaculares, como los dos números que protagoniza la vocalista Idania Valdés, interpretando, con la desnudez que ofrece la sola presencia de su voz y el piano, dos clásicos incandescentes como ‘Bésame mucho’ (con Ronaldo Luna en las teclas) y ‘Sabor a mí’ (con el piano de Bebo Valdés). Acompañada de banda (y bajo el nombre de Rita), Idania Valdés repite con ‘Sabor a mí’ y ‘Love for sale’, de Cole Porter. También se puede disfrutar de la voz de Estrella Morente en ‘Lily’, saliéndose de su traje de cantaora para ejercer de cantante con voz coloreada de flamenco. Un experimento delicioso.

Es «Chico & Rita» un disco de alto voltaje sensitivo, de esos que, una vez más, nos lleva a preguntarnos qué fue de todo ese público que hace una docena de años se subió a la explosión musical cubana alimentada por «Buena Vista Social Club» y que generó ediciones del fondo de catálogo de Egrem, nuevas grabaciones de los supervivientes, rescates de todo tipo, colecciones monográficas y que luego pareció desaparecer para siempre, como si nunca hubiera existido. Posteriormente, ya sabemos, las ediciones de música cubana cayeron en el olvido, como si de una moda pasajera se hubiera tratado.

Hay que darle las gracias a Fernando Trueba por su enorme buen gusto y por ese meritorio tesón que demuestra al apostar por estos sonidos –llegando al extremo de poner en pie una película de animación–, minoritarias, pero de una belleza conmovedora. Señalar, también, que tras esta grabación, Bebo Valdés, de 92 años, ha decidido retirarse, así que es probable que estemos ante su último disco.

Anterior entrega del disco del día: Eva Cassidy.

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