La irrupción de la canadiense Alanis Morisette en la escena musical sacudió los diales de medio mundo. Eduardo Izquierdo escoge sus diez canciones más inspiradas, para acompañar la lectura del reportaje que firma en el número 42 de Cuadernos Efe Eme.
Selección y texto: EDUARDO IZQUIERDO.
Nacida en Otawa (Canadá) el 1 de junio de 1974, Alanis Morissette no tardó demasiado en dar el pelotazo como cantante y compositora, después de unos primeros trabajos en el que se acercaba demasiado al pop y a la música disco, y en los que todavía no firmaba con su apellido. Pero llegaría Jagged little pill, su tercer disco, y su vida cambiaría por completo. Con más de treinta y tres millones de copias vendidas, se convirtió en uno de los álbumes más vendidos de la historia, a la altura de IV de Led Zeppelin, Bad de Michael Jackson, The wall de Pink Floyd o Sgt. Pepper’s Loneley Hearts Club Band. Un éxito masivo que le fue difícil de encajar, como explicamos en el artículo que le dedicamos en el último número de Cuadernos Efe Eme. Este ha sido la excusa para, de paso, escoger diez canciones que, por un motivo u otro, podemos considerar importantes en la carrera de Alanis. Ahí va la selección.
1. “You oughta know” (1995)
Una canción emblemática y un auténtico hito en la carrera de nuestra protagonista. Incluida en Jagged little pill, marcó un antes y un después para la canadiense. La escribió junto a Glen Ballard, que también produce el disco. Con una letra directa y la impactante interpretación vocal de Alanis, se convirtió en un himno de desamor y empoderamiento. La anécdota es que en sus créditos encontramos a Flea (Red Hot Chili Peppers) en el bajo y a Dave Navarro (ex Red Hot Chili Peppers y Jane’s Addiction) en la guitarra.
2. “Ironic” (1995)
Quizá la canción más conocida para los no iniciados, y por lo tanto su gran éxito a todos los niveles. A pesar de que su título haga referencia a la ironía, por el contenido de las situaciones expresadas, se ha puesto en duda que estas realmente lo sean. Alanis nunca ha dado demasiada importancia a esos temas lingüísticos aduciendo que ya se entendía lo que ella quería con la letra, y siempre se lo ha tomado con humor. Su videoclip en un coche con diferentes imágenes de ella misma es totalmente icónico.
3. Hand in my pocket” (1995)
Otro tema de Jagged little pill, y van tres, que por algo es su mejor disco. Optimista y filosófica, en esta canción explora la dualidad de la vida, combinando introspección y positivismo, y cómo puede haber incertidumbre y tranquilidad al mismo tiempo. Frases como «estoy rota, pero estoy feliz» pueden ser la muestra perfecta de esa dualidad de la que hablamos.
4. “Head over feet” (1995)
Quizá la balada más romántica de Jagged little pill y que nos va a servir para despedirnos del disco. Lejos del despecho, celebra el amor y da las gracias por una relación sana. Supone un potente contraste con las otras canciones del álbum, que se enfocan más hacia relaciones problemáticas o acabadas.
5- “Uninvited” (1998)
Una rareza, compuesta para la banda sonora de la película City of Angels acabó formando parte de Supposed former infatuation junkie. De tono intrigante, trata sobre el dolor de verse invadida por sensaciones y sentimientos no deseables. En su carácter sombrío y etéreo destaca, como casi siempre, su capacidad vocal. Es una de las canciones más atmosféricas de su carrera.
6. “Thank u” (1998)
Ya hemos entrado en Supposed former infatuation junkie. Nos adentramos, de paso, en la Alanis espiritual, que da las gracias por lo que tiene. Aquí no hay frustración ni rabia, sino puro agradecimiento por vivir, aunque esto pueda ser, a veces, complicado. Es relajada, desde su tono hasta el enfoque de la instrumentación. Alcanzó el número 4 de las listas de Rock Moderno de Billboard y el 3 en las listas de sencillos de Reino Unido. Otro mítico video con Alanis desnuda paseando por la ciudad.
7. “Joining you” (1998)
Nos quedamos en el mismo disco, aunque con un tema de mucho menos impacto mediático, pero no por eso peor. Aquí encara un tema muy complicado: la conexión con el dolor. Algo que ya ha tenido que vivir con intensidad a pesar de ser todavía muy joven. La angustia existencial y la alienación están presentes constantemente en su letra, y para eso es ideal el carácter sombrío de su envoltorio musical. Aparece destacada en casi todas las críticas del disco.
8. “Hands clean” (2002)
Por no quedarnos con canciones de solo dos álbumes, nos trasladamos a Under rug swept. Allí nos encontramos con este tema en el que volvemos a terrenos ya conocidos en la lírica de Morissette: la sinceridad y el impacto emocional. En este caso nos encontramos con una pareja que tienen una relación en la que ambos no se implican por igual, cosa que evidentemente produce fricciones. Tiene un cierto aroma pop en su melodía, que la hace muy accesible para el gran público.
9. “Everything” (2004)
Alanis puede ser feliz y aceptarlo, sin preguntarse demasiadas cosas, y eso es lo que hace en la canción incluida en So-called chaos. Aquí se lanza a disfrutar del amor incondicional con una minimalista instrumentación. Muestra claramente su evolución como artista de canciones más rotundas a temas de gran sensibilidad. Puesto 9 en las listas de sencillos de Canadá, se quedó en un discreto 59 en la lista de Billboard.
10.“Guardian” (2012)
De Havoc and bright lights, nos quedamos con esta canción que recoge su experiencia como madre. Y es que la maternidad impactó muchísimo en la vida de Alanis, como apuntamos en el ya citado artículo publicado en Cuadernos Efe Eme. La protección y el amor incondicional son, evidentemente, sus temas principales.