EL RITMO DE LA SEMANA
John Lennon: «Un héroe de la clase trabajadora es algo que debes ser. Mantenerte drogado con religión, sexo y televisión»
La nueva sección de los lunes en Efe Eme, “El ritmo de la semana”, es una columna de curiosidades y referencias culturales con trasfondo musical. Esta entrega viene protagonizada por el Día del Trabajador, algunas canciones que lo celebran y el cine de Lars Von Trier.
Una sección de SARA MORALES.
«¡Somos héroes! Héroes de la clase obrera. Luchamos por el derecho a meter más horas extras. Somos héroes de la clase obrera, el día 1 de mayo nos quedamos en la cama», cantan Lehendakaris Muertos en “Héroes de clase obrera”, de su disco Vine, vi y me vendí, del año 2008. Perfecta para arrancar esta semana en la que el jueves, posiblemente, más de uno alcance la quietud y el asueto anhelados. Bravo por ellas y ellos, claro que sí. Que se nos está olvidando no hacer nada, que estamos cayendo en la trampa de hacer del tiempo solo utilidad, que no sabemos gastarlo si no es en algo productivo y hasta los fantasmas del remordimiento y la conciencia vienen a achucharnos cuando nos dejamos estar sin más.
En esta vida atomizada que nos azota a todos, estamos perdiendo el sentido de la contemplación, de la observación, de la inspiración, y resulta que para seguir produciendo o creando ese es el punto de partida y la clave durante el camino. Hemos desaprendido a parar. Una pena que ya no tengamos tiempo ni para recordarlo. «En la nada también ocurren cosas», me dijo hace no mucho una amiga. Permitámonos estar en ella, aunque solo sea de vez en cuando. Claro que, como dice Raphael en “La canción del trabajo”, «el trabajo nace con la persona. Va grabado sobre su piel, y ya siempre le acompaña como el amigo más fiel». Y, no nos engañemos, tampoco le falta razón. Al final, somos lo que hacemos, y más todavía si ese hacer engulle el grueso de nuestras horas.
«Un héroe de la clase trabajadora es algo que debes ser. Mantenerte drogado con religión, sexo y televisión. Un héroe de la clase trabajadora es algo que debes ser, todavía hay espacio en la cima, te dicen», añade John Lennon en “Working class hero” (1970). Toca reflexionar. Pero, de momento, intentemos celebrar este 1 de mayo que nos viene por delante un año más, gracias a aquellos «héroes de la clase trabajadora» que, desde Chicago, en 1886, detuvieron la inercia con una huelga general para reivindicar una jornada laboral digna y mejores condiciones.
¿Una ilusión? ¿Una victoria conseguida solo a medias? El enigmático Lars Von Trier, —quien, por cierto, cumple años mañana 29 de abril— lo tiene claro, y así lo muestra y lo demuestra desde los personajes y las historias de sus películas, tan experimentales como controvertidas, en una exploración profunda de la clase trabajadora y el concepto de trabajo. Una mirada crítica e impasible, la del director de cine danés, hacia el sistema capitalista del que nadie logra escapar, con las desigualdades que se generan, la alienación, la pérdida de identidad y la lucha por la dignidad como meollo conceptual. Recordemos Europa (1991), o a Björk en el papel de Selma, una inmigrante checa obligada a entregar su vida en una fábrica, en Bailar en la oscuridad (2000) o a Nicole Kidman en la inmisericorde Dogville (2003).
Lo dicho, en una semana de fumata, en la que el jueves aparentemente es nuestro, aprovechemos. Ya el viernes, de resaca, aplaudiremos la llegada del nuevo disco de Suzanne Vega, Flying with angels, el primero original en más de una década. Y todo, como la música, continuará girando por los surcos establecidos.
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