“Somos cien por cien independientes: llevamos la oficina, llevamos el booking, el management… todo. Y por otro lado, estamos contando con grandes medios de comunicación como lo haría una banda mainstream, pero lo estamos haciendo para llegar a más gente”
Aunque la banda se originó en Madrid, se fueron a México a probar fortuna, lograron el éxito y allí han establecido su cuartel general. Ahora vuelven de gira a presentar “Frenético ritmo”, una recopilación con los mejores temas de sus dos discos que presentan estos días en los escenarios españoles. Sara Morales estuvo con ellos.
Texto: SARA MORALES.
Intensos días en Madrid los de Jenny & The Mexicats con la promoción de su nuevo álbum «Frenético ritmo». Una compilación con los mejores temas de sus dos discos anteriores publicados en México –su debut homónimo en 2012 y «OME» en 2014– que el pasado 25 de abril veían la luz por primera vez en España, de la mano de Esmerarte. Auténtica amalgama de sonidos la de este cuarteto multicultural que bebe de las influencias de sus raíces (México, España e Inglaterra) para desembocar en una fusión a priori impensable y atrevida pero, a la vista, posible. David Bowie, Pantera o Paco de Lucía se encuentran entre sus referentes. Y antes de ser lo que ahora son, Jenny le dio al rap en Reino Unido, ‘Pantera’ e Icho tocaban en bandas de rockabilly y David siempre estuvo ligado al mundo del flamenco. Hoy, con cierto guiño hacia su origen madrileño como banda, regresan a la tierra que los vio nacer con el éxito latinoamericano en los bolsillos. Tras enormes gafas de sol escondiendo la resaca del jet lag, una guitarra y el cajón, nos damos cita en la terraza de la Casa de América, un rincón a medio camino entre lo que fueron y lo que son.
Jenny & The Mexicats nació en España pero sin embargo vuestra carrera la habéis desarrollado en México ¿qué os empujó a cruzar el charco?
Cuando fuimos para México lo hicimos a modo de experimento, a ver qué tal funcionaba. Allí empezamos a movernos por festivales, uno de nuestros temas llegó al nº1 durante ocho semanas y conseguimos disco de oro. Pegó tal pepinazo que pensamos que no era momento de movernos; nuestros sencillos tuvieron muy buena acogida y por eso nos decidimos a sacar nuestro segundo disco allí.
Imagino que el público de aquellas tierras ya tiene muy interiorizada vuestra música.
Sí. En México nos hemos asentado porque es donde más trabajo tenemos, pero sí es cierto que gracias a estar allí hemos podido girar por Latinoamérica, Perú, El Salvador, Los Ángeles, Las Vegas… El éxito en México nos está permitiendo hacer todo esto y volver ahora a España para armar una gira en condiciones, con profesionales que nos apoyan y repercusión en los medios. Pero también queremos seguir bajando por Latinoamérica: Chile, Argentina…
¿Y Europa? Jenny, tú eres inglesa.
A mí me encantaría pasar más tiempo en Europa y hacer más cosas por aquí. Son diferentes culturas, diferentes formas de vivir, nosotros nos adaptamos a todo y México nos gusta mucho, pero cuando regresas por aquí… ¡te das cuenta de que esto es la buena vida!
Precisamente esa es, en buena medida, la filosofía de vuestra música, ¿no?
¡Justo! Nuestra música transmite buen rollo, buena onda… Intentamos decir muchas cosas con nuestras canciones, pero una de las principales es transmitir un mensaje de felicidad, de alegría.
Y para ello os nutrís de un montón de estilos, desde el rockabilly a la cumbia, pasando por el folk, el ska e incluso el veracruzano… ¿No puede esto despistar al público?
Somos versátiles y no nos dedicamos solo a un estilo de música, pero nuestro sonido es muy característico y personal. Hemos conseguido crear nuestro propio estilo, así ha sido desde el principio y no hemos querido que cambie, es nuestra seña de identidad.
Tocar tantos palos es también una forma de satisfacer el gusto de más personas, ¿no?
Pero no lo hacemos como si fuera una estrategia, no lo plantamos así. Así somos, es nuestra personalidad. Sonamos a nosotros mismos, ese es nuestro sello. Además, todos nuestros discos los hemos creado con los mismos productores (Juan García y Juan Pablo Toch) que nos conocen bien, nos cogieron muy verdes y hemos ido creciendo con ellos.
¿Cuál es el perfil de vuestros seguidores, entonces?
Somos muy afortunados como banda, parece que no importa el mercado a donde vamos, ni la edad del público ante el que tocamos… Siempre va bien. Desde adolescentes hasta mayores, pasando por niños. En México ha tenido mucho éxito entre el público infantil nuestros temas ‘Verde más allá’ y ‘Flor’. Nuestra música tiene un factor de inocencia que atrae.
¿Hay algún género tabú en Jenny & The Mexicats?
El reggaetón.
En canciones como ‘Me and my man’ también le dais al reggae. ¿De quién viene esa influencia?
Jenny: Mía. Me encanta el reggae, Bob Marley y un grupo alemán que se llama Seeed.
¿En qué escena os sentís más cómodos: mainstream o independiente?
En México no existe esa diferencia tan marcada como aquí y, en cualquier caso, nosotros hemos sabido tomar ventaja sobre las dos cosas, es un lujo poder aprovechar las ventajas de los dos mundos. En realidad nosotros somos cien por cien independientes: llevamos la oficina, llevamos el booking, el management… todo. Y por otro lado, estamos contando con grandes medios de comunicación como lo haría una banda mainstream, pero lo estamos haciendo para llegar a más gente. Además, las decisiones las tomamos nosotros.
“En el escenario tenemos mucha conexión entre nosotros, eso el público lo nota. Vamos a seguir con la misma fórmula que nos ha funcionado hasta ahora: dejarnos llevar un poco por lo que el público quiera”
Habladme de la génesis de vuestras composiciones. ¿Cómo tiene lugar el proceso creativo de un tema vuestro con tantas ideas a conciliar?
Pantera: Realmente es un proceso bastante caótico. Lo hacemos como va saliendo. Al venir de disciplinas tan distintas, tenemos diferentes formas de ver la música. Normalmente Jenny o yo llegamos con una melodía, o con una guitarra y van saliendo cosas, de forma muy improvisada y natural.
El día 22 tocáis en Bilbao (sala Azkena) y el 23 en Barcelona (sala Sidecar). ¿En el escenario también reflejáis ese brainstorming?
En el escenario tenemos mucha conexión entre nosotros, eso el público lo nota. Vamos a seguir con la misma fórmula que nos ha funcionado hasta ahora: dejarnos llevar un poco por lo que el público quiera. Que quiere fiesta, pues fiesta, que quiere algo más íntimo, pues más tranquilo. Adaptamos mucho el show en base a como el público se sienta. Además, nuestros temas van cambiando de inglés a español, spanglish…
¿Os ha costado mucho decidir qué canciones iban a formar parte de «Frenético ritmo»?
Intentamos pensar que le gustaría más al público de España, pero es complicado. Es como elegir a quién quieres más de todos tus hijos. Hicimos la selección de temas, nos pareció bien, pedimos consejo y también pareció bien, y así fue. De todos modos, todas nuestras canciones están en las plataformas digitales para quien quiera escuchar más.
¿En México también habéis publicado esta complicación?
No, solo para España. De hecho en México nos lo están pidiendo ya. No creo que lo editemos allí también, pero sí vamos a hacer algo especial con los fans.
¿Estáis al tanto de la escena de aquí, qué banda española seguís de cerca?
¡Vetusta Morla! Somos amigos y hemos seguido muy de cerca su trayectoria.
¿Cuál es vuestra meta a alcanzar con Jenny & The Mexicats?
Vivir de esto, hacer muchos discos y conocer el mundo tocando.
Si tuviérais que definir vuestra banda, vuestro disco y vuestra música en una sola palabra ¿cuál sería?
Fiesta.
