Patxi Andión: Desvelando el porvenir

Autor:

patxi-andion-16-01-10Patxi Andión, uno de los grandes de la canción de autor, acaba de publicar, tras una docena de años de silencio discográfico, el álbum «Porvenir», una obra que nos devuelve su voz profunda y única, su personal mirada como compositor. Un disco que analizamos en este artículo.


Texto: JAVIER DE CASTRO.


Han hecho falta algo más de diez años para poder escuchar nuevo material original de Patxi Andión y a fe del cielo que la espera ha valido la pena. No sabemos a ciencia cierta si tal impás ha sido voluntario o no; si la demora la ha causado la indudable crisis de toda índole que vive el sector; si simplemente ha sido éste el tiempo que el artista ha considerado necesario para componer con tranquilidad entre sus numerosos quehaceres académicos; para ordenar ideas entre viaje y viaje; o para seleccionar calmadamente de entre el, al parecer, abundantísimo material disponible, tras tanto tiempo de sequía discográfica. El caso es que visto lo visto y escuchado lo registrado pienso honestamente que el intervalo temporal transcurrido entre el lanzamiento de «Nunca. Nadie» (1998), su anterior entrega discográfica y la aparición de este extraordinario «Porvenir» (Nuba Records/Karonte) ha valido la pena puesto que muchas de las canciones que lo contienen, deberían desde ahora mismo ser consideradas como algunas de las mejores acuñadas nunca por el cantautor norteño afincado en Madrid.

patxi-andion-16-01-10-BY es que no sólo habría que considerar como material poético de alto voltaje a canciones como ‘María en el corazón’, ‘Recordar’, ‘Siempre es nunca’, ‘Viajar’, ‘Nada viene a ser verdad’, ‘Alentour’ (compuesta y cantada en francés y que retrotrae a su duro exilio en el vecino país a finales de los 60), ‘La luz debida’, ‘Nacida el diez de abril’ o ‘¡Es tan difícil dejar de pensar’, sino que además se ha acertado plenamente con las instrumentaciones, los arreglos y la producción escogidos, cosa no siempre fácil en esta clase de argumentaciones musicales en las que se suele tender con demasiada facilidad a la sobreexplotación sonora mediante el empleo casi siempre contraproducente de ingeniería técnica excesiva. Nada de eso en este caso, al contrario. Deben destacarse por su ponderación y belleza los acompañamientos instrumentales debidos a músicos de gran calibre y de larga y venturosa trayectoria como el batería Vicente Climent, el percusionista Luis Camino, el pianista Mariano Díaz, el flautista Xavier Paxariño, el guitarrista Josete Ordóñez, amén del trabajo no menos meritorio de Martin Leyton con el contrabajo acústico y el bajo eléctrico o del violoncelista José Luis López, así como los arreglos de cuerda de Carles Cases, además de la dirección musical de Javier Monforte y del trabajo de masterización de Óscar Herrador, que han servido para ofrecer un resultado que en conjunto se nos antoja auténtica orfebrería musical debido a su extrema ductilidad y a que por todos sus recovecos destila sensibilidad a raudales.

Hay que poner de manifiesto también que hasta la voz, enorme en otro tiempo y cuya cavernosa profundidad fue seña de identidad intransferible de este creador vasco con más de cuarenta años de profesión, parece haberse atemperado y lucir más color y matices que los de su antaño más reconocible y popular. Un tiempo aquel que primero lo descubrió como artista singular; el mismo que poco más tarde lo encumbró como conquistador de hit-parades; y el mismo que un día y por decisión propia vio como su carácter inconformista no siempre bien entendido le granjeó no pocas desilusiones personales y que acabó empujándolo lejos del mundanal cínico ruido que a punto estuvo de engullirle.

Primorosamente presentada y adornada con dibujos realizados para la ocasión por el artista Ricardo Cadenas para el librito que acompaña el disco, nos alegramos de que haya aparecido por fin esta colección de canciones titulada con la esperanzadora expresión «Porvenir» y que nos ha supuesto la primera gran alegría discográfica de este año que estrenamos. Nos alegramos más si cabe de la noticia por llegar este álbum de quien viene, en estos tiempos en que una mayoría injusta de nuestros grandes creadores de toda la vida viven un vergonzoso ostracismo mediático, y por suponer una más que hermosa aportación musical, cuestión poco baladí para estos erráticos tiempos que corren en el seno del negocio musical actual. Por todo ello, si tenemos que esperar otros diez años para que el bueno de Patxi vuelva a alegrarnos con otra entrega de tamaña calidad, pues eso, a esperar y contentos. Que siga trabajando así de bien en su Gloria particular.

Artículos relacionados